1 de junio de 2010

NAZI


NAZI



Alcé la vista mientras él continuaba declarando frente al tribunal. En la personación en el juicio coincidía por segunda vez con el hombre que me había marcado para siempre.

Después del accidente la asistencia sanitaria en el hospital había sido correcta. Sin embargo, el sanitario observaba mi herida en la frente con preocupación.

- Tendré que darle bastantes puntos a esa herida, el corte es grande-dijo cogiendo al mismo tiempo los útiles para coser.

-Por favor-le rogué- ,intente que no se vea la señal, que la cicatriz quede disimulada.

Entonces él contestó que haría un trabajo de diseño en mi cara y así fue. El resultado nos ha enfrentado en el juzgado y cuando he enseñado la cicatriz el Juez no ha tenido mas remedio que poner cara de asco:- Señor acusado, ¿no se le ocurrió disimular la cicatriz con algo que no fuera una maldita esvástica nazi?


Marien